Imperdible: este video fue enviado por Marina Fernández.
¡¡¡Gracias Marina por compartirlo!!!
CENTRO CEDES ARGENTINA Centro de Estudios Humanos Directora: Lic. Prof. Gabriela Ricciardelli DISP. N°376/DGEGP/1995
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Muy lindo marina, y lamentablemente tanto San Martín como Belgrano, en nuestra Argentina actual, hubiesen sido atropellados por quienes hoy mas se llenan la boca con ellos, aquellos para quienes la repetida palabra "patria" significa "yo y lo mío". Es cierto, habría que hecharlos a patadas del campo y los espacios que habitan au n a costa de tener que "andar en pelotas" el resto de nuestras vidas, sin embargo ¿estamos dispuestos a pagar ese y otros tantos precios?... es para pensar...
ResponderEliminarHugo, ante todo te agradezco haber comentado el video. Y en relación con lo que decís creo que si logramos, aún desde nuestros pequeñísimos espacios cotidianos, cambiar algo para que este mundo sea un poco mejor...ya colaboramos en recomponer alguna pieza de este rompecabezas (un poco descompuesto). En tu editorial de Abraxas hablás, justamente, de rearmar el rompecabezas... “En algún momento, hace tiempo, algo falló, y habrá que hacer memoria para reconstruir el rompecabezas donde las piezas fundamentales parecen [sólo parecen] estar perdidas”. ¡Creo que de eso se trata!
ResponderEliminarCuando respetuosamente veo videos o escucho comentarios referidos a los llamados padres de la patria (no solo de este pais sino de muchos otros) siempre me surge la siguiente pregunta, porque debemos llegar a una guerra? es justificable la misma? son justificables los "daños colaterales" ? realmente aquellos que toman las armas para resolver un conflicto son modelos para imitar?
ResponderEliminarRespeto a quienes asi lo creen, pero para mi no, para mi son padres de la patria y de las futuras generaciones quienes pueden resolver los conflictos de manera pacifica, quienes salvan vidas, quienes se entregan a la fraternidad, un Favaloro, un Cesar Milstein, un Ghandi. Seamos libres y que lo demas no importe suena bastante egoista. lo "demás" debe importar. Para mi el fin Jamás justifica los medios. Creo que debemos rearmar el rompecabezas partiendo de nuevas premisas, Modelar el futuro partiendo de violencia, sea cual fuere el signo o motivo será mantener una estructura social de pensamiento que dificilmente evolucionará por sobre lo material
Carlos, concuerdo en general respecto a que no son modelos a imitar aquéllos que buscan la guerra, aunque si fuésemos estrictos con este principio deberíamos condenar por estar viciadas por dicha metodología la mayor parte de la historia humana, incluyendo pasajes del Antiguo Testamento, en lo que se refiere al menos a David.
ResponderEliminarPero podríamos caer en incluir en la misma bolsa a quienes han reaccionado ante regímenes asfixiantes, el cual es el caso de América Hispana, y tal vez lo siga siendo si las diferencias étnicas son excusa de apropiación económica que abortan la vida y se convierten en daños colaterales oficiales, respetados e instituidos.
No nos deberíamos poner a pensar qué ocurre con los cuatro millones de niños africanos que mueren buscando coltan más de lo que nos ocupamos por las víctimas de la Amia, o bien, de los niños y mujeres palestinos asesinados por el estado de Israel.
Acuerdo en que este no es el camino de la concordia entre humanos aunque dudo acerca del camino que tomaría en caso de inanición por responsables ajenos a mi persona apropiadores de la vida por avaricia y usurpación.
No sé, creo que hay ya demasiada muerte como para que miremos y tratemos con alta moral como la de Favaloro y otros como prosigue indemne el criminal y el genocida. Parecieran dichos ejemplos insuficientes como para lograr la reversión del dominio de los señores de la guerra.
La autonomía personal, la libertad espiritual e intelectual está negada, así como el sentido fraterno en lo económico y la igualdad en lo jurídico, con lo cual dudo respecto al derecho actual que le asiste a la humanidad en cuanto a reorientarse, y en cuanto a los métodos con los que lo lograrán.
No seré quien siga principios que atenten contra la prosecución de la vida, pero la vida en las actuales imposiciones dista mucho de ser vida y puedo comprender a quienes se levantan para dejar de seguir muriendo.
Que esta espiral nos aleja de construcciones adecuadas alejadas de lo material parece ser evidente, no obstante dudo de la capacidad que tengamos de construir bajo el modelo pérfido de cancilleres y metralla. Si se niega la sal, soy ranquel, si se niega la tierra soy palestino, si se niega el agua soy argentino, si se usurpa la tierra seré reactivo.
Es su moral o la nuestra lo que está en juego, la de los criminales que reducen por la fuerza a la mitad de la humanidad porque les sobra ‘gente’ para lograr un nuevo proceso de acumulación, o la de las personas de bien.
Estamos en una situación dilemática, no condenaré a aquél que defiende su vida y su dignidad aunque en mí persista la duda respecto del resultado final.
Con saludos fraternos,
Daniel.